domingo, 1 de febrero de 2009

jesucristo

JESUCRISTO

Jesús de Nazaret, llamado también Cristo o Jesucristo, es la figura central del cristianismo. Para la mayoría de las confesiones cristianas, es el hijo y la encarnación de Dios, que redimió con su muerte al género humano y resucitó al tercer día. En el Islam, donde es conocido por el nombre de Isa, lo consideran también como uno de sus profetas más importantes. Es uno de los personajes que han ejercido una mayor influencia en la cultura occidental.
Según la opinión mayoritariamente aceptada en medios académicos, basada en una lectura crítica de los textos sobre su figura,[] Jesús de Nazaret fue un predicador judío.
Lo que se conoce de Jesús depende casi absolutamente[] de la tradición cristiana, especialmente de la utilizada para la composición de los evangelios sinópticos, redactados, según opinión mayoritaria, unos 30 ó 40 años, como mínimo, después de su muerte. La mayoría de los estudiosos considera que mediante el estudio de los evangelios es posible reconstruir tradiciones que se remontan a contemporáneos de Jesús, aunque existen grandes discrepancias entre los investigadores en cuanto a los métodos de análisis de los textos y las conclusiones que de ellos pueden extraerse. Existe una minoría que niega la existencia histórica de Jesús de Nazaret.

1- VIDA
Jesús nació durante el reinado del emperador romano Augusto, algo antes de la muerte de Herodes el Grande en el año 4 a.C. Algunos historiadores situan la fecha de su nacimiento antes de los años 4 y 6 de nuestra era. Comúnmente se dice que nació en Nazaret aunque aunque algunos evangelistas sostienen que su nacimiento tuvo lugar en Belén, debido a razones teológicas.
Fue hijo de Maria y José y su lengua materna se cree que fue el arameo como una forma dialectal de Galilea y Judea. También se dice que Jesús pudo hablar griego. Jesús vivió su infancia en Nazaret, pequeño poblado que estaba sobre una zona montañosa de Galilea y fue un hombre con mentalidad más rural que la propia de ciudad. Además se dice que trabajó como artesano con su padre José. Fue educado en el seno de una familia judía e iba a la sinagoga de su pueblo.
Con 30 años oyó hablar del movimiento de conversión de Juan el Bautista, un primo lejano suyo, junto al río Jordán y dejó Nazaret para ir allí a recibir el bautismo de mano de éste. Allí tuvo una experiencia religiosa muy importante, y a partir de este momento no volvió con su familia a Nazaret, aunque tampoco siguió al Bautista por mucho tiempo.
Su familia más cercana no le apoyó en su deseo de ser profeta itinerante llegando a pensar que estaba fuera de sí y que supondría la deshonra de la familia. Jesús logró formar un grupo de seguidores en torno a él que le apoyaban en sus ideas. Más tarde se vería como su familia se vincularía con el movimiento que él inició.
Su actividad itinerante no duraría ni tres años aunque fue muy intensa. Se cree que comenzó en le año 27 y terminó en el 30, edad a la que fue ejecutado. Dicha actividad se centra sobre todo en la ciudad de Jerusalén aunque también se mueve por os alrededores de la ciudad. Jesús se desplaza de un lugar a otro acompañado por un grupo de seguidores y discípulos, curando enfermos y predicando a la gente reunida todos los sábados en la sinagoga. Con frecuencia Jesús se retiraba a solas a orar.
A parte de su grupo de seguidores y discípulos Jesús alcanzó una importante popularidad en Galilea y en las regiones vecinas, movilizando masas importantes, hecho que le convertía en personaje peligroso ante las autoridades romanas. Además provocó el rechazo de sectores que trataron de desacreditarlo a él y a sus enseñanzas, despertando la oposición de varios grupos religiosos en Galilea y Jerusalén. Fue criticado de ayudar a pecadores y gente impura y acusado de estar poseído por el diablo, acusaciones de las que Jesús se defendió con firmeza.
En la primavera del año 30 Jesús fue detenido por las autoridades de Jerusalén por algo que había hecho en el Templo, ante lo que la aristocracia sacerdotal confirmó el peligro que suponía Jesús y trataron de hacerlo desaparecer. Por lo tanto Jesús murió crucificado el 7 de abril del año 30 tras una orden de ejecución dictada por el prefecto romano Poncio Pilato, orden tras la cual estaban los sumos sacerdotes de la ciudad.
El día antes de su ejecución se cree que Jesús celebró una cena de despedida con sus discípulos. En el momento de su detención seria abandonado por sus seguidores más cercanos. Jesús fue azotado, lo vistieron con un manto rojo, le pusieron en la cabeza una corona de espinas y una caña en su mano derecha. Los soldados romanos se burlaban de él diciendo: "Salud, rey de los Judíos".[] Fue obligado a cargar la cruz en la que iba a ser crucificado hasta un lugar llamado Gólgota. Le ayudó a llevar la cruz un hombre llamado Simón de Cirene.
Dieron de beber a Jesús vino con hiel. Él probó pero no quiso tomarlo. Tras crucificarlo, los soldados se repartieron sus vestiduras. En la cruz, sobre su cabeza, pusieron un cartel en arameo, griego y latín con el motivo de su condena: "Este es Jesús, el Rey de los Judíos", que a menudo en pinturas se abrevia INRI. Fue crucificado entre dos ladrones.[]

2- INVESTIGACIÓN HISTÓRICA SOBRE JESUCRISTO
A diferencia de lo que ocurre con otros personajes de la Antigüedad, pero al igual que sucede con otros muchos, no existen evidencias arqueológicas que permitan verificar la existencia de Jesús de Nazaret. La explicación principal que se da a este hecho es que Jesús no alcanzó en su tiempo una relevancia suficiente como para dejar constancia en fuentes arqueológicas.[]
Por otro lado, Jesús, como otros muchos destacados filósofos y dirigentes religiosos de la Antigüedad, no escribió nada, o, al menos, no hay constancia alguna de que así haya sido. Todas las fuentes para la investigación histórica de Jesús de Nazaret son, por lo tanto, textos escritos por otros autores. El más antiguo documento concerniente a Jesús de Nazaret es el llamado papiro P52, que contiene un fragmento del Evangelio de Juan y que data, según los cálculos más extendidos, de hacia 125, es decir, aproximadamente un siglo después de la fecha probable de la muerte de Jesús (hacia el año 30).
Si bien los testimonios materiales referentes a la vida de Jesús son muy tardíos, la investigación filológica ha logrado reconstruir la historia de estos textos con un alto grado de probabilidad, lo que arroja como conclusión que los primeros textos sobre Jesús (algunas cartas de Pablo) son posteriores en unos veinte años a la fecha probable de su muerte, y que las principales fuentes de información acerca de su vida (los evangelios canónicos) se redactaron en la segunda mitad del siglo I. Existe un amplio consenso acerca de esta cronología de las fuentes, al igual que es posible datar algunos (muy escasos) testimonios acerca de Jesús en fuentes no cristianas entre la última década del siglo I y el primer cuarto del siglo II.
En el estado actual de conocimientos acerca de Jesús de Nazaret, la opinión predominante en medios académicos es que se trata de un personaje histórico, cuya biografía y mensaje fueron significativamente alterados por los redactores de las fuentes, que actuaron movidos por intereses religiosos. Existe, sin embargo, una minoría de estudiosos que, desde una crítica radical de las fuentes, consideran probable que Jesús no fuese un personaje histórico real, sino una entidad mítica, similar a otras figuras objeto de culto en la Antigüedad.
Fuentes
Solo las fuentes cristianas, obviamente parciales, proporcionan información acerca de Jesús de Nazaret. Los textos cristianos reflejan principalmente la fe de las comunidades primitivas, y no pueden considerarse sin más documentos históricos.
Los textos en los que la crítica actual cree posible hallar información acerca del Jesús histórico son, principalmente, los tres evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas). Secundariamente, proporcionan también información acerca de Jesús de Nazaret otros escritos del Nuevo Testamento (Evangelio de Juan, epístolas de Pablo de Tarso), algunos evangelios apócrifos (como los de Tomás y Pedro), y otros textos cristianos.
Por otro lado, existen referencias a Jesús en unas pocas obras no cristianas. En algunos casos se ha puesto en duda su autenticidad (Flavio Josefo), o que se refieran al mismo personaje cuya vida relatan las fuentes cristianas (Suetonio). Apenas aportan alguna información, excepto que fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato (Tácito), que llamó la atención por sus "hechos portentosos" (Flavio Josefo) y que fue considerado un embaucador por los judíos ortodoxos. Sin embargo, estas escuetas referencias confirman que no se dudó de la existencia de Jesús en la Antigüedad.
Fuentes cristianas
Son muy numerosos los escritos cristianos de los siglos I y II en los que se encuentran referencias a Jesús de Nazaret. Sin embargo, solo una pequeña parte de los mismos contiene información útil acerca del mismo. Todos ellos reflejan, en primer lugar, la fe de los cristianos de la época, y solo secundariamente revelan información biográfica sobre Jesús.
Los principales son:
Las cartas de Pablo de Tarso: escritas, según la datación más probable, entre los años 50 y 60. Son los documentos más tempranos acerca de Jesús, pero la información biográfica que proporcionan es escasa.
Los evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas), incluidos por la Iglesia en el canon del Nuevo Testamento. En general, suelen datarse entre los años 70 y 90. Proporcionan gran cantidad de información, pero reflejan principalmente la fe de los primeros cristianos, y son documentos bastante tardíos.
El Evangelio de Juan, también incluido en el Nuevo Testamento. Fue escrito probablemente hacia 90-100. Suele considerarse menos fiable que los sinópticos, ya que presenta concepciones teológicas mucho más evolucionadas. Sin embargo, no puede excluirse que contenga tradiciones sobre el Jesús histórico bastante más antiguas.
Algunos de los llamados evangelios apócrifos, no incluidos en el canon del Nuevo Testamento. Una gran parte de estos textos son documentos muy tardíos que no aportan información sobre el Jesús histórico. Sin embargo, algunos de ellos, cuya datación es bastante controvertida, podrían transmitir información sobre dichos o hechos de Jesús: entre aquellos a los que suele concederse una mayor credibilidad están el Evangelio de Tomás, el Evangelio Egerton, el Evangelio secreto de Marcos y el Evangelio de Pedro.

3- RASGOS DE SU CARÁCTER Y SU FORMA DE SER
Jesús utilizó un lenguaje característico y sugerente, utilizando bellas parábolas para explicar sus ideas y creencias. Jesús no habló de si mismo sino que su predicación se centra en lo que el llama el Reino de Dios, mensaje que arranca de la tradición judía pero que no tiene nada que ver con la enseñanza oficial de los escribas, sino que surge de una profunda experiencia que trata de comunicar a los demás. En su predicación sobre dicho reino es característica su invitación a ser misericordiosos como lo es el Padre de los Cielos.
Jesús realizó curaciones a todo tipo de enfermos durante su vida que fueron consideradas como milagrosas. También practicó exorcismos y, por lo tanto, fue considerado como un exorcista y sanador popular. El presentó estas acciones como símbolos de la llegada del reino de Dios.
Jesús adoptó una conducta extraña y provocativa, ya que rompió con todas las normas establecidas y los códigos de comportamiento vigentes en la sociedad de su época. A esto hay que añadirle que tenía tendencia a vivir rodeado de gente indeseable, tales como prostitutas, recaudadores de impuestos, leprosos, etc. Además trataba con mujeres algo que no era bien visto en su época. Él consideró a todos como iguales, algo que rompía con la norma social establecida en el momento. También se dice que tuvo una actitud acogedora con los niños. Con esta forma de actuar se cree que pretendió hacer ver que en el Reino de Dios no se excluía ni se marginaba a nadie.
Jesús nunca pretendió romper con el judaísmo ni fundar una nueva religión o una institución propia en Israel. Esto sucedería más tarde gracias a la actuación de sus discípulos mas cercanos tras su muerte.

4- TEXTOS BÍBLICOS
a) Isaías 9
En este texto bíblico el profeta Isaías nos habla sobre el nacimiento de Jesucristo como la luz que ilumina un pueblo sumido en tinieblas y como la alegría con la que antes de su venida no contaban.
El profeta se refiere él como el Admirable, el Príncipe de la Paz, el Consejero, el Dios fuerte, el Padre Eterno,… diciendo también que es el príncipe de un imperio de paz en el que él, al ser el heredero del rey David y el Mesías esperado, ocupa tan importante trono.
b) Isaías 11
En este capítulo Isaías dice que sobre Jesús reposará el Espíritu Santo, un espíritu caracterizado por la sabiduría, la inteligencia, la fortaleza, el conocimiento y sobre todo por el temor a Dios.
Además Isaías predice que el Mesías que va a venir, es decir, Jesús juzgará con justicia a los pobres y con igualdad a todos por igual así como mediante su palabra pondrá a prueba a todos los hombres. Y será el pastor de todos los seres que habitan el planeta. Jesús traerá el perdón para todos los pueblos y la gloria para los hombres. Según Isaías Jesús será el camino correcto que deberá seguir el pueblo de Israel.
c) Isaías 44, 1-4
En este texto bíblico el profeta sostiene como Jesús es el Mesías prometido podios al pueblo de Israel y como en el reside el espíritu de Dios, que será derramado por la Tierra a través del Hijo de Dios (Jesucristo).
d) Isaías 49, 1-13
Según Isaías Jesús fue llamado por Dios y fue elegido por El antes de que naciera. Jesús fue elegido por Dios como si Hijo y Dios se reencarnó en hombre en Jesucristo. Jesús reconocerá a Dios como su fortaleza y será sus ojos en la tierra. Será quién levante las tribus de Israel en nombre de Dios.
Jesús será el encargado de llevar a cabo la obra de Dios en la tierra, como Redentor de Israel, sacando a los hombres de las tinieblas y dirigiéndolos por el buen camino.
e) Isaías 50, 4-9
En este texto Isaías explica como Dios le dio a Jesucristo la sabiduría para hablar de El y de convencer al mundo del mensaje de Dios. Jesús aceptó ser el siervo de Dios en la tierra y confió en que Dios le iba a ayudar en su misión.
Según dice Isaías en el texto Dios le abrió los ojos a Jesús y este aceptó la tarea k Dios le proponía a pesar de los insultos y las calumnias que pudiera recibir por ello.
f) Isaías 50, 13-15
Isaías nos dice como Jesús hará callar a todos los hombres, desde los mas pobres hasta los reyes más importantes, haciendo que estos le escuchen. Todos los hombres verán a través de Jesús lo que nunca vieron y oirán lo que nunca habían escuchado.
g) Isaías 53, 1-12
En este texto bíblico el profeta Isaías nos habla sobre el desprecio y la poca estimación que ofrecieron los hombres hacia la persona de Jesús, mientras que el soportó sus pecados y sus dolores y curó las enfermedades de muchos.
Jesús salió herido por nuestros pecados y el soportó el dolor de todos los hombres y él con su muerte salvó a todos los hombres, sufrió por todos sin decir nada, los salvó en nombre de Dios por su amor hacia ellos.
h) Hebreos 1, 1-14
A través de esta sagrada escritura podemos ver como Dios define a Jesús como su Hijo, el heredero de todo, por el que hizo el universo. Además sostiene que es el resplandor de su gloria.
Jesús purgó los pecados de todos los hombres mediante su sacrificio y se sentó a la derecha de Dios en los cielos, por encima de los ángeles que viven en ellos.
i) Efesios 2,13-18
Aquí podemos ver como Jesús es la paz de todos los hombres y derribó la barrera de separación que había entre ellos. Gracias a Jesús la paz le fue dada a todos los hombres, tras la reconciliación de él y Dios en un mismo cuerpo tras su muerte.
Por Jesucristo todos merecemos la entrada en el Reino de Dios y sobre todos se ha posado para toda la eternidad el Espíritu del Padre.

5-OPINIÓN PERSONAL SOBRE JESUCRISTO Y TRASCENDENCIA HISTÓRICA
En mi opinión la figura de Jesús no solo es un referente para la religión cristiana y para las ramas derivadas de ésta, sino que también es un modelo a seguir para todo el mundo en lo que se refiere a temas morales y de conducta. El hecho de que nos enseñara que se podía amar hasta a tu peor enemigo por encima de ti mismo le ha convertido en un antes y un después en la historia de la religión. Para mi Jesús no sólo es un modelo de conducta que debo de seguir sino que representa todos aquellos valores que, según mi criterio, pueden hacer que yo llegue a ser una persona de provecho, una buena persona, una persona que no sólo respete a los demás sino que se respete a sí mismo y que se sienta orgullosa de lo que es.
Lejos de discutir sobre lo que dicen que hizo los evangelios o sobre si es verdad que existió o no, no se puede negar que Jesús ha trascendido a lo largo de 2000 años hasta nuestros días y que todavía hoy se le sigue venerando (al menos por todos los cristianos), como el representante de Dios en la Tierra, como el salvador de todos los hombres y como la figura que nos marca el camino correcto que debemos seguir.


1 comentario:

magdalena dijo...

te digo lo mismo que en el comentario anterior.